A poco que os mováis por las redes sociales, seguro que ya sois conscientes de que una nueva tendencia culinaria está compitiendo a la hora del desayuno con tostadas y bollería: se trata del ‘porridge’ o, para entendernos, gachas de avena, a las que se le añade muesli, semillas y trozos de fruta de forma que el resultado no sólo está delicioso, sino que es de lo más fotogénico.
Además de presumir de aspecto, el ‘porridge’ es altamente nutritivo, contiene vitaminas, hierro, antioxidantes y proteínas, es saciante y ayuda a conservar la energía durante toda la mañana.
Instrucciones para principiantes: para preparar la base del porridge sólo hay que hervir los copos de avena en agua, leche o bebidas vegetales (calculad 4 cucharadas de avena y un vaso de líquido por persona) durante unos minutos hasta que adquiera textura de puré un poco grumoso. Podéis preparar un poco más y reservarlo en la nevera durante varios días.
Ahora llega el momento de dar rienda suelta a la creatividad. El ‘porridge’ admite casi cualquier ‘topping’ así que las posibilidades son infinitas. Os dejo algunas ideas de mezclas sencillas que ya hemos probado en casa y que nos han encantado:
- Plátano, pasas sultanas, semillas de chía y un chorrito de miel
- Muesli, manzana asada (o pera) y canela
- Fresas y crema de cacahuete
- Mango, kiwi y sirope de ágave
- Chocolate rallado y nueces
- Yogur y mermelada de sabores
Facilísimo, ¿verdad? Y, además de un desayuno estupendo para toda la familia, también es una merienda espectacular para los peques.
Seguro que más de una ya os habéis apuntado al desayuno de moda, porque es más fácil alimentarse de manera saludable cuando lo que es beneficioso para el organismo también convence al paladar, al igual que es más fácil no faltar a la cita con el gym si llevas un outfit molón y unas deportivas tan bonitas como las de la nueva colección sporty-chic de Merkal. Y es que todas las fuentes de motivación que nos empujen a mantenernos en forma son positivas, ¿no os parece? 🙂