Un bolso para cada momento

Estaréis de acuerdo conmigo en que lo más importante de un bolso es que se adapte a cada ocasión: Unas veces será enorme, otras solo grande, pequeño o incluso minúsculo. Seguro que la mayoría de vosotras sabéis a qué me refiero en cada caso.

En mi caso, está muy claro. Mi día a día, teniendo en cuenta que vivo con dos niños pequeños, mi bolso es grande tirando a enorme. Y lleno, muy lleno. De cosas que se necesitan y otras que no, pero ahí están. Seguro que esto también os suena… Y para que esto sea así, y yo pueda ir lo más cómoda y funcional posible, no faltan en mi armario un bolso de shopping, como éste de CREEKS en piel que combina con todo y es ideal para ir a la oficina y salir pitando a por los niños al cole,  y una bandolera, cómoda y funcional para echarme al hombro, como esta de Fosco.

Por la tarde, para salir con los niños a dar un paseo o al parque, intento ir algo más cómoda reduciendo el tamaño del bolso. Suelo elegir modelos ligeros, anatómicos y que se ajusten bien sin demasiado peso. Es el momento de modelos como esta bandolera más pequeña de LA HALLE, ¿qué os parece?

Y por último, si mi plan es dejar a los enanos en casa para salir a cenar con Carlos, ¡la cosa cambia! En este caso, cuanto menos lleve, mejor. Con el móvil, la cartera y una barra de labios casi os diría que tengo suficiente. Para estas contadas ocasiones, me encantan las carteras de mano o con cadenitas muy finas para llevar, sencillos pero elegantes como este precioso clutch de Fosco.

Está claro que cada una tenemos un estilo diferente, espero que os hayan gustado mis opciones, y ahora contadme, ¿cuál es vuestro estilo preferido?

Salir de la versión móvil